En Bretonia, la administración de aldeas, castillos y tierras recae sobre los Caballeros del Reino; nobles que han jurado los votos del caballero y que se deben a su ducado y, por ende, a su Duque para toda la vida. Sin embargo, en Mousillon, esta relación entre caballeros y Duque se extiende durante mucho más tiempo. En el Ducado Maldito ni la sangre azul asegura el descanso eterno. Aquí, campesinos y caballeros luchan codo con codo en un jerarquía que los sitúa al mismo nivel, por debajo de los Nigromantes y Vampiros que controlan sus huesos y despojos para sus oscuros planes.
Los Nobles funestos de Mousillon son Caballeros del Reino reconvertidos en Caballeros Negros por las artes nigromáticas. Sin embargo, pese al polvo de sus ropajes y el óxido de sus armaduras, estos caballeros aún portan los coloridos emblemas que lucieron en vida. Los amarillos y negros propios del ducado de Mousillon se mezclan con los rojos, blancos, azules y violetas de otras casas vasallas, pero todas con la heráldica de la flor de lis, propia de este reino de decadencia.
Ni siquiera las pesadas losas funerarias de la catedral de Mousillon garantizaron que el último duque de Mousillon, Maldred, profanase el descanso de los duques y nobles del pasado para despertarlos como caballeros tumularios y formar así su más letal caballería No Muerta. Pese a la derrota del duque vampiro, el nuevo rey Gastón de Beau Geste permitió que los restos de los No Muertos reanimados retornases a sus tumbas, al no haber éstos tenido voluntad propia para combatir contra las tropas leales al Hada Hechicera durante la guerra civil acontecida en los eventos del Falso Grial, como muestra de misericordia y respeto hacia los ancestros y descendientes del padre fundador de Mousillon; Landuin.
Por desgracia, Maldred no sería el único en despertar a los nobles de Mousillon para alzarlos en armas en contra de sus deseos. El Caballero Negro, siguiendo los pasos de Maldred, ha reunido a todas las fuerzas vivas y muertas de este ducado maldito con el fin de alzarse una vez más contra el legítimo rey de Bretonia. De nuevo, los Nobles funestos de Mousillon irán a la guerra para enfrentar a Louen Leoncoeur y quebrantar el Código de Caballería que juraron hace siglos.
Los Nobles funestos de Mousillon componen una de las principales bazas de la Hueste Maldita de Mousillon para frenar las poderosas cargas de los caballeros bretonianos. Pese a tener que medirse contra el resto de ducados que componen la tierra de los caballeros, Mallobause; el Caballero Negro, dispone de todos los efectivos que tiene y alguna vez tuvo el pequeño ducado de Mousillon. Entre telarañas y polvo, estos caballeros No Muertos portan ahora en su estandarte el emblema de la serpiente, el maligno símbolo de su nuevo señor.
Terminada esta breve introducción histórica de Mousillon, el asunto del Falso Grial, Maldred, Mallobaude y sus caballeros, es el momento de dedicar unas líneas a estas maravillosas miniaturas pero, si se quiere ahondar más en este tema, por aquí dejo una de las primeras publicaciones que daban el pistoletazo de salida al proyecto de la Hueste Maldita de Mousillon. Bien, hace mucho mucho tiempo, cuando soñé con realizar un pequeño batallón de Condes Vampiro inspirados en Bretonia (luego acabaría dándome cuenta que ya existía algo así en el trasfondo de la mano del clan Dragón Sangriento y de Mousillon) me encontré con el pequeño inconveniente de conversionar los caballos de los Caballeros del Reino/Noveles en corceles esqueléticos. Los caballos de plástico que aun a día de hoy siguen haciendo las delicias de los jugadores bretonianos son auténticos destreros de fuertes músculos, por lo que nada parecía indicar que bajo sus bardas se encontrasen huesudos fémures y costillas sin carne. La opción de usar los caballos de 5ª edición o los corceles esqueleto estaba ahí, pero con los cuerpos también fuertes de los jinetes se veían raros: mucho caballero para tan poco caballo.
Así pasaron los años, sin atreverme a meter mano a aquellos rocines, aunque sí a los caballeros. Por suerte, llegaron las impresoras 3D, y de todos los modelos que inundan la red con caballeros esqueleto, ninguno hacia más justicia a Mousillon ni a las proporciones de Warhammer Fantasy que los de Norba Miniaturas. Estos Caballeros Negros (así se conocen a los caballeros esqueleto en este mundillo) acompañaron a una gama de otros jinetes humanos durante la campaña de mecenazgo con la quela empresa española pretendía sacar al mercado más de 200 novedades en forma de miniaturas de 28 mm. Con alguna que otra cabeza conversionada y unas peanas a la altura, los 10 Caballeros No Muerto por los que siempre había suspirado estaban por fin listos para ser enviados a los campos de batalla pintar.
Como viene siendo habitual en este proyecto, pronto los caballeros recayeron en las profesionales manos de Marta García. Bastaba decirla cómo quería el esquema general y ella obraría la magia. Tenía claro que los Nobles funestos de Mousillon debían ser cada uno de su padre y de su madre. Tal y como aparecía en el libro de ejército de Bretonia de 6ª edición, cada ducado cuenta con unos colores, sí, pero los diferentes nobles y señores que lo habitan tienen su propia heráldica y no tienen por qué lucir las mismas tonalidades que el duque (aunque muchos sí). Esto se refleja perfectamente en los ejércitos bretonianos previos a The Old World, que por algún motivo ha prescindido de esta pauta. Con ello en mente, necesitaba que la mayoría llevasen el amarillo y negro de Mousillon, otros pocos rojos y negros y el resto mezclas de otros colores con el negro (para simbolizar la oscuridad que se cierne sobre esta tierra). Además, el estandarte debía mostrar a la serpiente dorada sobre el fondo negro de la heráldica del general de Mousillon: Mallobaude, el Caballero Negro.
Fue en este estandarte donde me llevé una grata sorpresa. El estandarte era una vuelta de tuerca del clásico emblema de la serpiente, pues ésta, al igual que los caballeros que la portan con orgullo (obligados), es totalmente esquelética. No obstante, por la parte trasera de este pendón sí se encuentra la forma más sibilina y estilizada de esta deleznable casa nobiliaria. Es lo bueno que tiene dar libertad creativa a los maestros del pincel.
Por lo demás poco ya queda por decir. Los Caballeros Negros son la caballería clásica y barata, pero aun así de élite, de los Condes Vampiro. Poseen una gran armadura pese a las abolladuras de sus corazas y a las roturas en sus cotas de malla. Tienen unos atributos por encima de cualquier humano medio, y encima no retroceden ante ninguna acometida. Siempre lucharán hasta que el vínculo nigromántico que les une a la No Vida se rompa, pisoteando hasta entonces los cuerpos de sus enemigos con las pezuñas de sus corceles y ensartando con sus lanzas a aquellos que les desafíen. No son la temida caballería vampírica pero sin duda son dignos de temer.
A continuación se muestran más fotografías de esta unidad desde distintos ángulos. Hay muchos ejércitos inspirados en esta facción de Mousillon, por lo que espero que estas imágenes puedan servir a quienes están pensando cómo definir su propio contingente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario